RECORTAN LAS BECAS A LOS ESTUDIANTES Y PONEN TOPES A LOS SALARIOS DOCENTES.

Abajo el plan de Macri

El nuevo ataque macrista a la educación con el recorte de las 30.000 becas a los estudiantes de la escuela pública de la Ciudad está generando una ola de indignación popular. La respuesta de los estudiantes no se hizo esperar: toma de decenas de escuelas, una gran movilización y el comienzo de la coordinación. El próximo miércoles 3 los docentes van nuevamente al paro y preparan junto a los estudiantes una gran marcha unitaria.
Mientras muchas alumnas madres, 1100 chicos en situación de indigencia y 12 mil que viven bajo el nivel de pobreza en las Villas y barrios pobres de la Ciudad se ven privados de esta mínima “ayuda”, el gobierno avanza en la privatización y en los negociados con los grandes grupos económicos. Desde el control de la publicidad en la vía pública, la del mobiliario urbano, hasta el “negocio de la basura”. Con 400 escuelas con problemas edilicios y 70 sin gas, esta medida puso nuevamente al descubierto la magnitud del descalabro de las distintas administraciones capitalistas de la Ciudad. Para lo único que ha servido la votada "emergencia edilicia" es para favorecer a grupos como a los Roggio, entre otros, con un régimen de indexación automática de contratos, incluso cuando muchas de las obras no comenzaron, ventaja que no tienen los docentes de la Capital con los topes salariales.
En la Ciudad más rica del país sobran los recursos pero están destinados a las grandes corporaciones, a cientos de “asesores” del gobierno macrista que ganan sueldos de 25.000$ por mes y a subsidiar la educación privada que acaban de ampliar con otros 100 millones, entre otras cosas
Como si esto fuera poco, para “apretar” a los estudiantes en lucha e impedir la unidad con los maestros, el ministro Narodowski de Macri ordena para los docentes y directivos: confeccionar “listas negras”en las escuelas, enviar policía, prohibir la participación de los docentes en las medidas de lucha fuera de su horario laboral, y reafirmar que todas las “horas perdidas” se recuperen los sábados o durante el verano.
La hipocresía kirchnerista
Con la hipocresía que los caracteriza, la oposición kirchnerista toma como suya la demanda de las becas, cuando votaron el magro presupuesto educativo y viene compartiendo negocios como el de la obra pública que es, en muchos casos, conjunta. La constructora Iecsa de Calcaterra, primo de Macri, es parte de los adjudicatarios del “tren bala”.
Ahora denuncian la subejecución presupuestaria cuando ésta viene siendo la regla en todas las áreas, como en salud, vivienda (increíblemente en el presupuesto del 2008 se destina a este rubro 16 millones de pesos por todo concepto). Un chiste sino se tratara de una de las peores penurias que sufren cientos de miles de personas que carecen de vivienda. Para el Club de París, al que la presidenta acaba de anunciar que pagará la deuda de 6.700 millones de dólares y para los grandes empresarios todo, para los trabajadores y el pueblo pobre que es el que sufre los bajos salarios, y una educación y salud que se caen a pedazos, nada.
Los acuerdos entre macristas y kirchneristas también aparecen cuando se trata de enfrentar las luchas y manifestaciones populares. Mientras el macrismo restringe las libertades democráticas mínimas con la penalización de las manifestaciones callejeras y la aplicación a “rajatabla” del Código Contravencional (votado por ibarristas), cuando hay movilizaciones el gobierno de Macri apela a la “colaboración” de la policía de Aníbal Fernández, como hemos visto en las últimas semanas con los brutales desalojos que dejaron heridos y 23 presos o en el emblemático conflicto del Casino durante el verano.
Por una gran movilización de docentes, estudiantes y demás sectores populares
Para profundizar y ampliar la lucha que comenzaron los estudiantes contra el recorte a las becas es necesario soldar la unidad con los docentes y los padres, en su mayoría trabajadores y con las amas de casa que son quienes más sufren la carestía de la vida producto de la inflación. El paro y movilización conjunto de la mayor parte de los sindicatos docentes en todos los niveles y modalidades educativas y de los estudiantes de la Capital, tiene que ser el comienzo de un gran plan de lucha frente a la crisis educativa. Las direcciones sindicales no pueden permitir que dividan las demandas.
Becas para todos los estudiantes que las requieran. Aumento del salario docente acorde a la canasta familiar. Resolución inmediata de la crisis edilicia. Gas y calefacción para todos los colegios y facultades. Por la triplicación del presupuesto educativo.
Este tiene que ser el inicio de una lucha masiva contra el plan de Macri que todos los partidos patronales de la oposición vienen dejando pasar.
¡Todo nuestro apoyo a los estudiantes en lucha! ¡Por el triunfo de sus reclamos!